Recetas de Macarrones
1. Macarrones caseros
A cuatro tazas de harina, añadir un huevo bien batido, y agua suficiente para hacer una masa que se pueda enrollar. Estirar con un rodillo fino sobre una tabla de pan y cortar en tiras. Secar al sol. La mejor disposición para este propósito es un marco de madera al que se le ha clavado un cuadrado de tela de queso, sobre el que se pueden colocar los macarrones de manera que no se toquen, y después se cubren con una tela de queso para evitar el polvo durante el secado.
2. Macarrones cocidos
Se pone una taza grande de macarrones en agua hirviendo y se cuece hasta que estén tiernos. Cuando estén hechos, escúrrelos bien, entonces añade medio litro de leche, parte de nata si se puede, un poco de sal y un huevo bien batido; remueve sobre el fuego hasta que espese, y sirve caliente.
3. Macarrones con salsa de nata
Se cuecen los macarrones como se indica en el procedimiento y se sirven con una salsa de nata preparada calentando al baño maría medio litro de leche. Cuando esté hirviendo, se añade una cucharada colmada de harina, frotada en un poco de leche y un cuarto de cucharadita de sal. Si se desea, se puede aromatizar la salsa remojando en la leche, antes de espesar, durante diez o quince minutos, una rodaja de cebolla o unos trocitos de apio, y removiendo con un tenedor.
4. Macarrones con salsa de tomate
Se echa una taza de macarrones en leche y agua hirviendo, a partes iguales. Se dejan hervir durante una hora, o hasta que estén perfectamente tiernos. Mientras tanto, prepare la salsa pasando una pinta de tomates guisados o enlatados por un colador para eliminar todas las semillas y fragmentos. Se calienta hasta la ebullición y se espesa con un poco de harina; una cucharada sopera por cada pinta será la proporción necesaria. Añadir sal y, si se desea, media taza de nata dulce muy fina. Sirva los macarrones en platos individuales, con una pequeña cantidad de salsa sobre cada plato.
5. Macarrones al horno con granola
Cocer una taza grande de macarrones hasta que estén tiernos en leche y agua hirviendo. Cuando estén hechos, escúrrelos y pon una capa de los macarrones en el fondo de una budinera, y espolvorea por encima una cucharadita escasa de granola. Añada una segunda y tercera capa y espolvoree cada una de ellas con granola; a continuación, vierta sobre el conjunto una salsa de natillas preparada mezclando medio litro de leche, las yemas bien batidas de dos huevos o un huevo entero y un cuarto de cucharadita de sal. Hay que tener cuidado de colocar los macarrones en capas sin apretar, para que la salsa se impregne fácilmente en el conjunto. Hornee sólo unos minutos, hasta que la crema esté bien cuajada, y sirva.
6. Huevos y macarrones
Cocer una taza de macarrones en agua hirviendo. Mientras se cuecen los macarrones, se hierven las yemas de cuatro huevos hasta que estén harinosos. Se puede utilizar el huevo entero si se coge para que las yemas estén harinosas en las claras simplemente gelificadas, no endurecidas. Cuando los macarrones estén hechos, escúrralos y ponga una capa de ellos dispuesta sin apretar en el fondo de una budinera. Corta las yemas cocidas y extiende una capa de ellas sobre los macarrones. Rellenar la fuente con capas alternas de macarrones y huevo, procurando que la capa superior sea de macarrones. Verter sobre el conjunto una salsa de nata preparada como sigue: Calentar una taza y tres cuartos de leche rica hasta que hierva, añadir una cuarta cucharadita de sal y una cucharada colmada de harina frotada con un poco de leche fría. Cocer hasta que espese, y luego volcar los macarrones. Espolvorear la parte superior con pan rallado y dorar en el horno caliente durante ocho o diez minutos. Servir caliente.
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